Fomentamos la cohesión y el apoyo mutuo entre todos los trabajadores, reconociendo que en la fuerza colectiva reside nuestra mayor fortaleza para alcanzar objetivos comunes.

Impulsamos una cultura de dedicación y responsabilidad en el desempeño de nuestras funciones, conscientes de la importancia de nuestra labor para el correcto funcionamiento del Poder Legislativo.

Actuamos con honestidad, rectitud y total transparencia en la gestión de los recursos y en la toma de decisiones, rindiendo cuentas claras a nuestros agremiados.

Defendemos un trato justo e igualitario para todos los miembros, sin distinción de jerarquías o áreas de trabajo, velando por la aplicación imparcial de los derechos y obligaciones.

Promovemos un ambiente laboral armónico, basado en el respeto a la diversidad de ideas, a la dignidad de las personas y al diálogo como principal herramienta para la solución de conflictos.

Buscamos constantemente áreas de oportunidad para aportar ideas y soluciones que mejoren los procesos y servicios del Poder Legislativo, posicionando a los trabajadores como agentes de cambio positivo.